¿Podría ser mexicano el próximo Papa? ¿Qué probabilidades existen?

La muerte del Papa Francisco el 21 de abril de 2025 ha abierto un período de incertidumbre y expectación en la Iglesia Católica, mientras el mundo aguarda la elección del próximo líder espiritual de los 1.300 millones de católicos. Con el Cónclave programado para el 6-11 de mayo de 2025, las especulaciones sobre el sucesor de Francisco han ganado fuerza, y en México, un país con una profunda tradición católica y más de 100 millones de fieles, surge una pregunta esperanzadora: ¿podría un mexicano convertirse en el próximo Papa?

Dos cardenales mexicanos, Carlos Aguiar Retes y Francisco Robles Ortega, figuran entre los 138 electores del Cónclave, pero, ¿cuáles son sus probabilidades reales? Este artículo, basado en análisis de Infobae, El Financiero, La Nación y publicaciones en X, explora las posibilidades, los desafíos y el contexto global que rodea esta histórica oportunidad.

El contexto del Cónclave y la representación mexicana

El Cónclave reunirá a 138 cardenales menores de 80 años en la Capilla Sixtina, donde se requerirá una mayoría de dos tercios (92 votos) para elegir al 267.º Papa, según la constitución Universi Dominici Gregis.

El Colegio Cardenalicio, diversificado por Francisco con nombramientos de regiones como Tonga, Haití y Papúa Nueva Guinea, refleja una Iglesia más global: 53 electores son europeos, 23 asiáticos, 23 latinoamericanos, 18 africanos, 14 norteamericanos y 4 de Oceanía. México, con seis cardenales en el Colegio, tiene solo dos electores habilitados: Carlos Aguiar Retes, arzobispo primado de México, y Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara.

La elección de un Papa mexicano sería un hito sin precedentes, especialmente tras el impacto de Francisco, el primer pontífice latinoamericano. México, como el segundo país con más católicos en el mundo y epicentro del culto guadalupano, tiene un peso simbólico innegable. Sin embargo, las probabilidades de un Papa mexicano enfrentan obstáculos significativos, según expertos como Roberto Blancarte, vaticanista mexicano entrevistado por Infobae.

Los cardenales mexicanos: Trayectorias y perfiles

Carlos Aguiar Retes

Nacido el 9 de enero de 1950 en Tepic, Nayarit, Aguiar Retes, de 75 años, es el arzobispo primado de México desde 2017, nombrado por Francisco. Ordenado sacerdote en 1973, estudió Teología en México y Estados Unidos y fue nombrado cardenal en 2016. Su trayectoria incluye roles clave como secretario general (2000-2003) y presidente (2006-2009) del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), así como arzobispo de Tlalnepantla (2009-2017). Cercano a Francisco, comparte su visión pastoral de inclusión, justicia social y evangelización, lo que lo alinea con la corriente progresista del Vaticano.

Aguiar Retes es reconocido por su trabajo en la formación del clero y su compromiso con las comunidades marginadas. Sin embargo, su perfil discreto y su limitada proyección internacional podrían ser desventajas frente a cardenales con mayor visibilidad, como Pietro Parolin o Luis Antonio Tagle.

Francisco Robles Ortega

Nacido el 2 de marzo de 1949 en Mascota, Jalisco, Robles Ortega, de 76 años, es el arzobispo de Guadalajara desde 2012, una de las diócesis más importantes de América Latina. Nombrado cardenal por Benedicto XVI en 2007, presidió la Conferencia del Episcopado Mexicano (2012-2018) y el CELAM (2011-2015). Su enfoque pastoral enfatiza los valores tradicionales, como la familia y la bioética, lo que lo sitúa en una postura más moderada-conservadora en comparación con Aguiar Retes.

Robles Ortega fue mencionado como papable en 2013 por el diario italiano Corriere della Sera, destacando su devoción al Padre Pío y su buena impresión entre los cardenales. No obstante, su edad avanzada y su menor exposición global limitan sus posibilidades.

¿Cuáles son las probabilidades?

Según Roberto Blancarte, las probabilidades de un Papa mexicano son bajas, aunque no imposibles. “Juntar dos tercios de los votos nunca es fácil”, explicó a Infobae, señalando que los 138 electores requieren un consenso significativo. Blancarte destacó que tanto Aguiar Retes como Robles Ortega han mantenido gestiones discretas, con pocas apariciones internacionales, lo que reduce su visibilidad frente a candidatos como Pietro Parolin (Italia, 29% en Polymarket), Luis Antonio Tagle (Filipinas, 21%) o Peter Turkson (Ghana, 14%).

Ana Luisa Trujillo, académica de la UNAM, coincidió en que los cardenales mexicanos “necesitan más proyección o generar alianzas” dentro del Vaticano para competir con figuras de mayor peso diplomático o carisma. México, pese a su relevancia católica, no cuenta con un bloque nacional homogéneo en el Cónclave, y las corrientes ideológicas —progresistas, moderadas y conservadoras— dominan las negociaciones.

Plataformas de apuestas como Polymarket y 1xBet no incluyen a los mexicanos entre los favoritos, priorizando a europeos como Matteo Zuppi (12%) o africanos como Turkson. ChatGPT, en un análisis para Infobae, asigna mayores probabilidades a Zuppi (69 años, progresista) y Parolin (70 años, moderado), mientras que Gemini menciona a Péter Erdő (Hungría, conservador) y Jean-Claude Hollerich (Luxemburgo, progresista). Los mexicanos, aunque mencionados en listas de papables, no figuran en los primeros puestos.

En X, el entusiasmo por un Papa mexicano es notable, aunque especulativo. Publicaciones de @Multimagen_Info y @alcalorpolitico citan a voceros eclesiásticos de Cuernavaca y Xalapa afirmando que Aguiar Retes y Robles Ortega “tienen posibilidades”, mientras que @MVSNoticias destacó una predicción de la astróloga Mhoni Vidente, quien aseguró que “el próximo Papa podría ser mexicano”, generando revuelo entre los usuarios. Sin embargo, estas afirmaciones carecen de sustento oficial y reflejan más un deseo colectivo que una probabilidad concreta.

Factores a favor y en contra

A favor

  • Peso de México en el catolicismo: Con más de 100 millones de católicos y el culto guadalupano como símbolo global, México tiene una relevancia espiritual que podría influir en los electores, especialmente tras el precedente de un Papa latinoamericano.
  • Trayectorias sólidas: Ambos cardenales tienen experiencia pastoral y administrativa, con roles destacados en el CELAM y la Conferencia Episcopal Mexicana, lo que les otorga credibilidad.
  • Cercanía a Francisco: Aguiar Retes, en particular, comparte la visión reformista de Francisco, lo que podría atraer a los 110 cardenales nombrados por él, que dominan el Cónclave.
  • Historial de sorpresas: Como señaló Inés San Martín a Infobae, el Cónclave es impredecible. Francisco no estaba entre los favoritos en 2013, y un candidato menos visible, como un mexicano, podría emerger si las negociaciones se estancan.

En contra

  • Falta de proyección internacional: Blancarte y Trujillo coinciden en que los mexicanos carecen de la exposición global de figuras como Parolin, quien ha negociado acuerdos con China, o Tagle, conocido por su carisma en Asia.
  • Edad avanzada: A los 75 y 76 años, Aguiar Retes y Robles Ortega son mayores que candidatos como Tagle (67) o Zuppi (69), lo que podría desalentar a electores que prefieren un pontificado largo.
  • Competencia feroz: Cardenales como Parolin, Tagle, Turkson y Zuppi tienen mayor respaldo en las apuestas y análisis, con perfiles que combinan diplomacia, pastoral y visibilidad.
  • Divisiones ideológicas: El Cónclave está marcado por tensiones entre progresistas, que buscan continuar las reformas de Francisco, y conservadores, que prefieren un retorno a la tradición. Los mexicanos, al no liderar ningún bloque ideológico, podrían quedar relegados.

El sentir en México y el impacto de un Papa mexicano

En México, la posibilidad de un Papa mexicano ha generado entusiasmo, especialmente tras la elección de Francisco, que rompió la hegemonía europea. Publicaciones en X, como la de @carlosmartinh, reflejan esta esperanza: “¿Puede haber un Papa mexicano? México está en la lista de papables”. Voceros eclesiásticos, como Tomás Toral Nájera en Cuernavaca, han alimentado el optimismo, destacando el peso de México en el catolicismo global.

Un Papa mexicano sería un hito histórico, fortaleciendo la influencia de América Latina en la Iglesia y elevando el culto guadalupano como símbolo universal. Podría también inspirar un renacimiento de la fe en un país donde la secularización y la violencia han desafiado a la Iglesia. Sin embargo, expertos como Christopher Bellitto, historiador de la Universidad Kean, advierten que “quien entra al Cónclave como Papa, sale como cardenal”, subrayando la imprevisibilidad del proceso.

Una posibilidad remota, pero no imposible

Aunque Carlos Aguiar Retes y Francisco Robles Ortega cumplen los requisitos para ser elegidos Papa, sus probabilidades son bajas debido a su limitada proyección internacional, edad avanzada y la fuerte competencia de cardenales como Pietro Parolin, Luis Antonio Tagle y Matteo Zuppi.

México, con su rica tradición católica, tiene un peso simbólico que podría inclinar la balanza en un escenario de negociaciones prolongadas, pero los expertos coinciden en que un Papa mexicano es más un anhelo que una probabilidad concreta. Mientras el Vaticano se prepara para el Cónclave de 2025, los fieles mexicanos rezan por un milagro guadalupano, sabiendo que, en la Capilla Sixtina, el Espíritu Santo siempre puede sorprender.