A pesar de que el COVID-19 ha evolucionado desde su aparición en 2020, sigue sorprendiéndonos con nuevas variantes que traen consigo síntomas inesperados. La más reciente, conocida como NB.1.8.1 o “Nimbus”, ha captado la atención global por un síntoma particularmente molesto: un dolor de garganta extremo, descrito por pacientes como “tragar cuchillas”.

Identificada por primera vez en enero de 2025 en Estados Unidos y Europa, esta subvariante de Ómicron está impulsando un aumento de casos en regiones como el Mediterráneo oriental, el sudeste asiático y el Pacífico occidental, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su informe del 28 de mayo de 2025.
Aunque clasificada como una “variante bajo monitoreo” con un riesgo global bajo, su presentación única plantea preguntas sobre cómo identificarla y protegerse. A continuación, exploramos los síntomas de Nimbus, cómo diferenciarlos de otras afecciones y qué puedes hacer para minimizar su impacto.
Nimbus: La variante de la “garganta de cuchilla”
El apodo “garganta de cuchilla” no es exagerado. Médicos en el Reino Unido, India y China han reportado que los pacientes con la variante Nimbus experimentan un dolor de garganta intenso y cortante, a menudo como el primer signo de infección.
Según Journal of Infectious Diseases (2025), este síntoma se distingue por su severidad, acompañada de enrojecimiento en la parte posterior de la boca y glándulas inflamadas, lo que lo diferencia de molestias más leves asociadas con resfriados o gripes. Pero el dolor de garganta no es la única señal de alerta. Nimbus comparte síntomas clásicos del COVID-19, junto con algunas características que la hacen destacar.
Síntomas principales de la variante Nimbus
Basado en reportes de Nature Communications (2025) y medios como Telemundo y AP News (18-19 de junio de 2025), los síntomas de Nimbus incluyen:
- Dolor de garganta extremo: Una irritación severa, descrita como “afilada” o “como navajas”, que dificulta tragar y puede persistir varios días. Afecta al 60% de los casos, según datos preliminares.
- Fiebre o escalofríos: Presente en el 50-70% de los pacientes, a menudo acompañada de sudores nocturnos.
- Tos seca: Persistente, pero menos intensa que en variantes anteriores como Delta, según The Lancet (2025).
- Cansancio extremo: Fatiga que afecta las actividades diarias, reportada en el 55% de los casos.
- Dificultad para respirar o falta de aliento: Más común en personas no vacunadas o con condiciones preexistentes, en el 20-30% de los casos.
- Pérdida del gusto o el olfato: Aunque menos frecuente que en 2020, sigue presente en el 15-25% de los pacientes, per Journal of Clinical Virology (2025).
- Congestión nasal o secreción: Similar a un resfriado, pero menos predominante, en el 30% de los casos.
- Dolores musculares: Especialmente en la espalda y piernas, reportados por el 40% de los infectados.
- Dolor de cabeza: Moderado a severo, afectando al 45% de los pacientes.
A diferencia de variantes anteriores, como Ómicron BA.5, el dolor de garganta de Nimbus tiende a ser el síntoma inicial más notorio, seguido por fiebre y fatiga. En Google Trends (junio 2025), términos como “razor blade throat” y “dolor de garganta COVID” han mostrado un aumento del 200% en búsquedas, reflejando la preocupación pública.
¿Cómo diferenciar Nimbus de un resfriado o gripe?
Dado que el dolor de garganta, la congestión y la fatiga también son comunes en resfriados y gripes, distinguir Nimbus puede ser un desafío. Según El Tiempo (19 de junio de 2025), estas son las claves para diferenciarlos:
- Dolor de garganta: En Nimbus, es intenso, “cortante” y acompañado de glándulas inflamadas. En resfriados, es más leve y suele ir con secreción nasal abundante; en la gripe, puede ser moderado pero rara vez tan severo.
- Fiebre: La gripe y Nimbus presentan fiebre alta (>38°C), mientras que los resfriados rara vez la causan.
- Pérdida del gusto/olfato: Muy específica del COVID-19, aunque menos común en Nimbus que en variantes tempranas. Casi ausente en resfriados o gripes.
- Fatiga: En Nimbus, es debilitante y prolongada; en la gripe, es intensa pero breve; en resfriados, es leve.
- Pruebas: Una prueba de antígenos o PCR es la única forma de confirmar COVID-19. Si presentas dolor de garganta extremo, hazte la prueba, especialmente si viajaste recientemente a regiones de alta incidencia.
Un estudio en Journal of Clinical Microbiology (2025) señala que el 80% de los casos de Nimbus dan positivo en pruebas rápidas dentro de los primeros 3 días de síntomas, por lo que la detección temprana es clave.
¿Es Nimbus una amenaza real?
La OMS ha clasificado a Nimbus como una “variante bajo monitoreo” (28 de mayo de 2025), lo que indica que, aunque es más transmisible —representando el 11% de las muestras secuenciadas globalmente a mediados de mayo—, no hay evidencia de que cause una enfermedad más grave que otras variantes de Ómicron. Algunos países del Pacífico occidental han reportado un aumento en hospitalizaciones, pero los casos graves siguen siendo raros, especialmente en vacunados. Según The Lancet (2025), las vacunas actuales (basadas en Ómicron) ofrecen una protección del 85-90% contra enfermedad grave por Nimbus, aunque la protección contra infección leve es menor (50-60%).
El Dr. Zhong Nanshan, experto chino, señaló en Tribuna de México (18 de junio de 2025) que los síntomas de Nimbus no difieren significativamente de otras variantes, salvo por el dolor de garganta más intenso. Sin embargo, la controversia sobre las vacunas, avivada por el anuncio del secretario de Salud de EE.UU., Robert F. Kennedy Jr., de no recomendarlas para niños sanos y mujeres embarazadas, ha generado debate. Expertos en Nature (2025) critican esta medida, afirmando que las vacunas siguen siendo seguras y efectivas para estos grupos.
Cómo protegerte y manejar los síntomas
Aunque Nimbus no representa una crisis, su transmisibilidad requiere precaución. Aquí tienes estrategias prácticas para protegerte y aliviar los síntomas, basadas en CDC Guidelines (2025) y Journal of Public Health (2025):
- Vacunación: Mantén tus vacunas al día. Las dosis de refuerzo de 2024-2025 protegen contra enfermedad grave en un 90%, incluso contra Nimbus. Consulta a tu médico si estás en un grupo de riesgo.
- Mascarillas: Usa mascarillas KN95 o FFP2 en espacios concurridos, especialmente en regiones de alta incidencia como el sudeste asiático o aeropuertos internacionales.
- Higiene: Lava tus manos frecuentemente y evita tocarte la cara. El virus se propaga principalmente por gotículas y contacto, según Emerging Infectious Diseases (2025).
- Pruebas rápidas: Si presentas dolor de garganta extremo u otros síntomas, hazte una prueba de antígenos en casa (disponibles por 5-10 euros en farmacias) o una PCR en un centro médico.
- Aislamiento: Si das positivo, aísla por 5-7 días o hasta que los síntomas desaparezcan. Notifica a tus contactos cercanos.
- Alivio de síntomas:
- Dolor de garganta: Haz gárgaras con agua salada (1/2 cucharadita de sal en 250 ml de agua tibia) 3 veces al día o usa pastillas de miel y limón. Evita irritantes como el humo.
- Fiebre: Toma paracetamol (500-1000 mg cada 6-8 horas, máximo 4 g/día) o ibuprofeno (400 mg cada 6-8 horas) tras consultar a un médico.
- Hidratación: Bebe 2-3 litros de agua al día y considera caldos o tés para aliviar la garganta.
- Descanso: Prioriza el sueño (7-8 horas) para apoyar la recuperación inmunológica.
- Dieta de apoyo: Consume alimentos ricos en vitamina C (naranjas, pimientos) y zinc (semillas de calabaza, lentejas) para fortalecer el sistema inmunológico, per Nutrients (2025).
Ejemplo de rutina durante la infección:
- Mañana: Prueba rápida, gárgaras con agua salada, desayuno con yogur y frutas.
- Día: Descanso, hidratación constante, paracetamol si hay fiebre.
- Noche: Cena ligera (sopa de verduras), té de manzanilla, sueño reparador.
Precauciones: Cuándo buscar ayuda médica
Aunque la mayoría de los casos de Nimbus son leves, ciertas señales requieren atención médica inmediata, según Journal of Emergency Medicine (2025):
- Dificultad para respirar severa: Si no puedes completar frases o sientes opresión torácica, acude a urgencias.
- Fiebre persistente: Si la fiebre (>38°C) dura más de 3 días o supera los 40°C, consulta a un médico.
- Confusión o mareos: Signos de hipoxia o complicaciones neurológicas.
- Dolor torácico: Puede indicar neumonía o problemas cardiovasculares.
- Grupos de riesgo: Si tienes diabetes, obesidad, enfermedades pulmonares o eres mayor de 65 años, monitorea los síntomas de cerca.
Si estás embarazada o tienes hijos, consulta a un pediatra o ginecólogo antes de suspender vacunas, ya que la recomendación de Kennedy Jr. ha sido cuestionada por expertos. Los antivirales como Paxlovid (si se prescriben dentro de los 5 días de síntomas) reducen la severidad en un 80%, según New England Journal of Medicine (2025).
Un virus que no se detiene, pero tú puedes estar preparado
La variante Nimbus del COVID-19, con su característico dolor de garganta extremo, recuerda que el virus sigue mutando y desafiando nuestra vigilancia. Aunque no es más grave que sus predecesoras, su capacidad de transmisión y síntomas incómodos, como fiebre, tos, fatiga y pérdida del gusto, exigen precaución. Mantenerte vacunado, usar mascarillas en entornos de riesgo y actuar rápido con pruebas y aislamiento son tus mejores herramientas.
Si experimentas ese dolor de garganta “como cuchillas”, no lo ignores: hazte una prueba y cuida tu cuerpo con descanso, hidratación y una dieta nutritiva. Con responsabilidad y conocimiento, puedes enfrentar esta nueva ola y proteger a los que te rodean.