Elon Musk predice el fin de la Tierra y aboga por la colonización de Marte

Elon Musk, fundador de SpaceX y Tesla, ha reiterado su advertencia sobre el destino inevitable de la Tierra, afirmando que la vida en el planeta será destruida debido a la expansión del Sol. En una entrevista reciente en el programa Jesse Watters Primetime de Fox News, emitida el 6 de mayo de 2025, Musk explicó que el Sol, al agotar su hidrógeno en aproximadamente 5,000 millones de años, se convertirá en una gigante roja, incinerando la Tierra y haciendo imposible la vida.

“Eventualmente, toda la vida en la Tierra será destruida por el Sol. Necesitamos ser una civilización multiplanetaria, porque la Tierra será incinerada”, afirmó. Su solución: colonizar Marte como un “seguro de vida” para la humanidad.

Una amenaza cósmica respaldada por la ciencia

Musk basa su predicción en hechos científicos bien documentados. Según la NASA, el Sol, una estrella de tipo G, tiene una vida útil de unos 10,000 millones de años, de los cuales han transcurrido aproximadamente 4,600 millones. En unos 1,000 millones de años, el aumento de la luminosidad solar elevará las temperaturas terrestres, evaporando los océanos y reduciendo los niveles de oxígeno, lo que hará la vida insostenible.

Dentro de 5,000 millones de años, el Sol se expandirá hasta convertirse en una gigante roja, potencialmente engullendo Mercurio, Venus y la Tierra. Musk calcula que a la Tierra le queda un 10% de su tiempo habitable, unos 450 millones de años, antes de que las condiciones sean letales.

Aunque este escenario está lejano, Musk también ha señalado riesgos más inmediatos, como el impacto de un asteroide o cometa. En septiembre de 2024, comentó sobre el asteroide 2024 ON, clasificado como “potencialmente peligroso” por la NASA debido a su tamaño (290 metros) y su cercanía (1 millón de kilómetros). “Un día, un gran cometa impactará la Tierra y destruirá casi toda la vida, como ha pasado antes”, escribió en X, subrayando la urgencia de expandirse al espacio.

Marte como refugio

Para Musk, la colonización de Marte no es una fantasía, sino una necesidad estratégica. “Marte es un seguro para la vida colectiva”, afirmó en la entrevista con Fox News. A diferencia de la Tierra, Marte podría convertirse en un hogar viable mediante terraformación y el uso de recursos como el hielo subterráneo y su atmósfera de dióxido de carbono.

Su empresa, SpaceX, está desarrollando el cohete Starship, un sistema reutilizable diseñado para transportar grandes cargas y tripulaciones. Con ocho vuelos de prueba hasta mayo de 2025, Starship ha mostrado avances, aunque enfrenta retos como fallos en la etapa superior.

Musk estima que el primer ser humano podría pisar Marte en 2029, con el objetivo de establecer una colonia autosuficiente que no dependa de suministros terrestres. “No se trata de plantar una bandera, sino de construir una civilización sostenible”, explicó, destacando la necesidad de producir alimentos, energía y materiales en el planeta rojo. Sin embargo, reconoce desafíos: la radiación cósmica, la baja gravedad y la atmósfera hostil de Marte requieren avances tecnológicos significativos.

Otras amenazas al futuro humano

Además del fin cósmico, Musk ha advertido sobre riesgos antropogénicos. En febrero de 2025, señaló una “sequía eléctrica” causada por la creciente demanda de inteligencia artificial y vehículos eléctricos, que podría colapsar las redes energéticas si no se invierte en energía limpia. También ha expresado preocupación por la baja tasa de natalidad en países como Japón y China, que podría llevar a una crisis demográfica global, y el avance descontrolado de la robótica, que podría desplazar a los humanos si no se regula.

Críticas y escepticismo

La visión de Musk no está exenta de controversia. Algunos científicos, como astrobiólogos citados en El Cronista, consideran que colonizar Marte es “inmensamente complejo” debido a sus condiciones extremas, y podría requerir siglos de investigación. Otros, como el escritor Douglas Rushkoff, critican a Musk por priorizar soluciones individuales, como la colonización espacial, sobre problemas terrestres como el cambio climático. Rushkoff argumenta que los magnates tecnológicos usan estas ideas para “aislarse” de las crisis globales, ignorando soluciones colectivas.

En X, las opiniones están divididas. Usuarios como @ElonClipsX y @cb_doge respaldan la urgencia de Musk por colonizar Marte, mientras que otros, como comentaristas en meneame.net, lo acusan de exagerar para atraer financiación o de descuidar problemas inmediatos como la contaminación. Sin embargo, Musk insiste: “Convertirse en una civilización espacial o morir: esas son las dos opciones”.

Un llamado a la acción

La predicción de Musk sobre el fin de la Tierra no busca generar pánico, sino movilizar a la humanidad hacia la exploración espacial. A través de SpaceX, su objetivo es reducir los costos de los viajes interplanetarios y hacer de Marte un refugio viable. Aunque el escenario apocalíptico del Sol está a millones de años, Musk ve la colonización como una inversión en el futuro, no solo contra desastres cósmicos, sino también contra amenazas terrestres como guerras o colapsos demográficos.

“La Tierra tiene fecha de caducidad”, sentenció Musk, pero su mensaje es de esperanza: la humanidad puede sobrevivir si actúa con visión estratégica. Mientras Starship avanza y los planes para Marte toman forma, el debate sobre el futuro multiplanetario está más vivo que nunca.