Los visores Apple Vision Pro están recibiendo elogios por su diseño y rendimiento, destacando su precisión en video y sonido, así como su innovadora interfaz gestual. Sin embargo, su propósito exacto aún no está claro, lo que plantea interrogantes sobre su valor, especialmente considerando su precio elevado.

Los impactos profundos del uso de estas tecnologías
Estos dispositivos, al igual que otros como los Quest 3 y Quest Pro de Meta, emplean tecnología de video passthrough, que captura y reproduce imágenes del mundo real dentro del visor, creando un entorno virtual.
Este tipo de inmersión prolongada en la realidad virtual podría tener impactos significativos en la percepción humana y en la forma en que interactuamos con el mundo y entre nosotros.
Posibles efectos secundarios que pocos se atreven a contar
Expertos como Jeremy Bailenson advierten sobre los posibles efectos de pasar largas horas inmersos en estos dispositivos, sugiriendo que podría tener repercusiones a gran escala en nuestra percepción de la realidad. En resumen, el uso extendido de visores de realidad virtual podría desencadenar un experimento social masivo que altere nuestra comprensión compartida de lo que es real.
Los efectos secundarios de la realidad virtual a corto plazo son bien conocidos. Las personas suelen tener dificultades para juzgar la distancia correctamente en entornos sintéticos, lo que puede resultar especialmente peligroso para actividades como conducir o andar en patineta mientras se usa un visor de realidad mixta.
La distorsión de objetos también es común, ya que las cosas pueden deformarse o cambiar de tamaño, forma o color cuando se mueve la cabeza.

Efectos secundarios a largo plazo
Estos problemas son reconocidos en el ámbito de la tecnología de la información. Si bien pueden ser tolerables durante cortos períodos de uso, como para jugar o ver una película, se vuelven más graves con el tiempo.
Investigadores como el equipo de Bailenson han experimentado síntomas como náuseas, dolores de cabeza y mareos al usar visores de realidad virtual durante varias semanas.
Aunque los usuarios tienden a adaptarse a estos efectos, el ajuste prolongado a una percepción distorsionada puede llevar a problemas de orientación en el mundo real, incluso después de quitarse el dispositivo.
Por lo tanto, aquellos que pasan mucho tiempo usando visores como los Apple Vision Pro podrían enfrentarse a dificultades para navegar en entornos reales y sentir efectos perceptivos extraños al final del día.