Convertir un asteroide en una estación espacial podría ser posible en un tiempo relativamente corto

Construir una gran estación espacial, donde podrían vivir cientos de miles de personas, si no más, no sería fácil. Necesitarías mucho material e incluso una vez construido, tus habitantes tendrían que lidiar con dos problemas de salud importantes: los efectos de la baja gravedad en sus cuerpos y mucha radiación cósmica. Un nuevo artículo, tiene una solución audaz para estos problemas: construir la estación espacial dentro de un asteroide y hacer que gire.

El enfoque lo propone David W. Jensen, miembro técnico jubilado de Rockwell Collins, y brinda una visión bastante detallada de lo que se necesitaría para construirlo. Muy importante, mediante el uso de robots autorreplicantes, el asteroide se convertiría en una estación espacial en solo 12 años y por tan solo (relativamente) $ 4.1 mil millones. Esa es una suma modesta cuando se trata de proyectos espaciales ambiciosos, y esto es ciertamente ambicioso.

Ignoremos los requisitos robóticos por el momento. El primer paso para Jensen fue encontrar un asteroide adecuado que pudiera convertirse en una estación espacial. Seleccionó el asteroide Atira. Este es un objeto cercano a la tierra que nunca cruza la órbita de nuestro planeta. Tiene 4,8 kilómetros (3 millas) de ancho y está hecho de piedra. Incluso tiene una luna, un objeto secundario de aproximadamente 1 kilómetro (0,6 millas).

La idea sería usar el material del asteroide para construir todo, incluidos los paneles solares y la propia estación. Jensen se conformó con una estructura de toro, con forma de dona. El borde exterior de la rosquilla brindaría protección contra varios peligros, desde la radiación hasta los micrometeoritos, mientras que en el interior se podrían construir múltiples niveles para maximizar la habitabilidad.

Atira gira cada 3,4 horas, pero esto debería acelerarse considerablemente para proporcionar gravedad cercana a la Tierra a los habitantes de esta estación anillada. Con un radio de poco más de 2,1 kilómetros (1,3 millas), tendría que completar una rotación cada 105 segundos.

Ahora, el costo y la escala de tiempo son cifras aproximadas, pero provienen del detalle robótico crucial: enviar robots que puedan construir todos los componentes de la estación espacial, desde módulos habitables hasta células solares, utilizando materiales que se encuentran en el asteroide. Esto incluiría a otros robots para que el grupo original enviado fuera lo más pequeño posible.

Una vez hecho esto, estos robots podrían moverse fácilmente a otros asteroides, comenzando de nuevo el proceso de reestructuración. 

La gente ha estado soñando con esto desde Konstantin Tsiolkovsky en 1903. Los planes no siempre son prácticos, pero esta idea es sin duda un paso más cerca de lo que podría lograrse.