6 de septiembre de 2025 – En la noche del 7 al 8 de septiembre de 2025, el cielo ofrecerá un espectáculo inolvidable: un eclipse lunar total que teñirá la Luna de un rojo cobrizo durante 82 minutos, convirtiéndose en uno de los eclipses más largos de la década.

Según la NASA, este evento, conocido como “Luna de Sangre”, será visible en gran parte del hemisferio oriental, abarcando Europa, África, Asia, Australia y partes de Oceanía, pero no será visible desde América. Con una visibilidad estimada para 7.03 mil millones de personas (el 88% de la población mundial), este fenómeno astronómico promete ser uno de los más observados de los últimos años.
El eclipse, que ocurre cuando la Tierra se alinea entre el Sol y la Luna, proyectando su sombra sobre el satélite, alcanzará su fase total entre las 17:30 y 18:52 UTC, con un pico a las 18:12 UTC, según datos de Star Walk. Su duración y la coincidencia con una superluna –cuando la Luna está cerca de su perigeo (10 de septiembre, 12:11 UTC)– harán que el satélite se vea más grande y brillante, amplificando el espectáculo.
Un evento global con impacto cultural

Este será el segundo eclipse lunar total de 2025, tras el ocurrido el 14 de marzo, que fue visible en América. Según National Geographic, cerca de 6.27 mil millones de personas podrán observar la totalidad completa desde regiones densamente pobladas como Asia y Australia Occidental, mientras que en Europa y África la Luna aparecerá teñida de rojo al salir, justo tras la puesta de sol.
La Wikipedia señala que este eclipse, parte de la serie Saros 128, ocurre en el nodo ascendente de la órbita lunar, en la constelación de Acuario, cerca de las estrellas Lambda y Psi¹ Aquarii.
La “Luna de Sangre” debe su color a la refracción de la luz solar a través de la atmósfera terrestre, que filtra los tonos azules y deja pasar los rojos y naranjas, creando un resplandor único. Durante los 82 minutos de totalidad, los observadores podrán notar un punto amarillo brillante cerca de la Luna: el planeta Saturno, visible a simple vista, con Neptuno como un tenue punto azul verdoso detectable con telescopios pequeños, según EL PAÍS.
Cómo observar el eclipse
A diferencia de los eclipses solares, los eclipses lunares son seguros para observar a simple vista, sin necesidad de protección ocular. La NASA recomienda buscar un lugar con horizonte despejado y cielos libres de nubes para disfrutar plenamente del evento.
Binoculares o un telescopio pequeño pueden enriquecer la experiencia, revelando detalles como cráteres lunares bañados en luz rojiza. Para capturar el momento, un smartphone en un trípode con exposición ajustada puede lograr fotos espectaculares, según National Geographic.
En España, el eclipse será visible al atardecer del 7 de septiembre, con la Luna saliendo ya eclipsada. En Madrid, por ejemplo, la totalidad se apreciará durante 18 minutos desde las 20:34 CEST, mientras que en Palma de Mallorca durará 45 minutos, según el Instituto Geográfico Nacional. Sin embargo, en Galicia occidental y las Islas Canarias, solo se verá la fase parcial final.
Un fenómeno con resonancia histórica
Los eclipses lunares han fascinado a la humanidad durante siglos, a menudo asociados con mitos y presagios. En 2025, este evento coincide con la Luna de Maíz, nombre dado por culturas indígenas a la luna llena de septiembre, simbolizando abundancia, según Star Walk. La combinación de una superluna y el eclipse lo hace aún más especial, ya que la Luna estará 2.6 días antes de su perigeo, apareciendo un 14% más grande que en su apogeo.
El próximo eclipse lunar total será el 2-3 de marzo de 2026, visible en partes de América, pero menos espectacular. Este 7 de septiembre, el mundo tiene una oportunidad única para conectarse con el cosmos. Como dijo Andrew Fazekas en National Geographic: “Este eclipse no solo es un espectáculo visual, sino una invitación a maravillarnos con la danza de los cuerpos celestes”. Prepara tu cámara, busca un buen lugar y no te pierdas este evento histórico.